Después de un ingente trabajo de la Comunidad Internacional, para modernizar el país, todo se vino abajo. Los “Taliban 2.0” tomaron el poder.
En este año se han retrocedido 20 años, los avances conseguidos en economía, sociedad, educación, … se ha desvanecido. Los nuevos Talibán a los que en ocasiones algunos dirigentes políticos han pretendido “blanquear” son aún más crueles y fanáticos que sus antecesores.
La nueva generación, la mejor preparada de la historia de Afganistán, ha perdido su trabajo y sus esperanzas.
Los hijos han vuelto a vivir las pesadillas de sus padres, las hijas las pesadillas de sus madres. Para ellas la formación que recibieron les sirve de poco, no pueden realizar actividades fuera de casa, han perdido la libertad y los derechos que progresivamente habían ido ganando. No hay trabajo, no hay comida, no hay posibilidades de formación para todos, … ¿Es posible mayor frustración?
Mientras tanto, perciben que aquella Comunidad internacional que tantas esperanzas les trajo, se está olvidado de ellos. Cada vez son menos las menciones en la prensa, ningún país les muestra un apoyo decidido. Después de unos frenéticos, e insuficientes, días de evacuaciones de la gente que había colaborado en los proyectos internacionales, de los que sirvieron de traductores, de los que ilusionados se graduaron en las Universidades del país en carreras propias de aquellos países, …. se sienten abandonados.
Las pocas y reducidas evacuaciones, los obstáculos y lentitud burocrática de las Embajadas, la escasa, si no nula empatía, que han mostrado muchos dirigentes políticos, hace que se sientan totalmente desamparados.
Aunque muchos prefieran ignorarlos, hacer como si no existieran, las personas con sensibilidad no deben mirar a otro lado.
Cuando se cumple 1 año, los medios han querido hacerse eco de la situación actual…. Tenemos que hablar ALTO y CLARO
(Se puede escuchar la entrevista de Radio pinchando en la foto)
En esta situación que los dirigentes mundiales no parecen dispuestos a revertir. Los afganos que permanecen en su país seguirán viviendo aterrorizados, con miedo a ser secuestrados o asesinados, sometidos a sus fanáticos gobernadores y, ….. sin esperanza alguna durante muchos años.